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| El puente umbrío (Óleo sobre lienzo) |
La umbría bajo el puente está silenciosa y desierta. Apenas se escucha el tenue y cantarín murmullo del agua y el zumbido ocasional de algún insecto.
Hace tiempo que el trol de pelo áspero y color panocho abandonó el puente, unos dicen que vencido por la astucia inocente de los cabritillos y otros que se marchó en busca de otras ambiciones más pecuniarias y arancelarias.
El caso es que el puente se alza atemporal, solitario e imperturbable bajo la húmeda espesura y sobre el arroyo tranquilo. Tan sólo lo visitan, ocasionalmente, las libélulas, con sus enormes ojos tristes e iridiscentes, mientras van de caza en busca de mosquitos o de bellas historias.
Recuerdos de verano.
Ahora releed si os place: Extinción
Publicado por Balder
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