El día de Reyes es un día de alegría e ilusión. Alegría e Ilusión para los niños que abren emocionados sus regalos. Pero también debería de serlo para los adultos.
Si lo pensamos bien, la historia de los Magos nos cuenta como tres hombres que, según dice la tradición, eran uno de cada raza, uno de cada continente y uno de cada edad, se pusieron en camino, juntos, sin tener en cuenta ni sus diferencias, ni sus problemas étnicos, territoriales o generacionales, para encontrar la Salvación del Mundo, encarnada en un Recién Nacido.
No puede haber una parábola más hermosa ni una metáfora más optimista del objetivo último de la humanidad.
Con lo que este día es un día de esperanza y de confianza en el ser humano. Un día en el que podemos mantener la ilusión de que todavía podemos dirigirnos juntos, en paz, en busca de un objetivo común.
Así que no perdamos la fe de este día. Ni el anhelo de que todos los pueblos del mundo podamos ser capaces de caminar unidos en busca de un futuro mejor y de la Salvación para todos. Pero para todos juntos.
No perdamos la ilusión.
Feliz día de Reyes.
Publicado por Farela y Balder.
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