Romancero

          Cuando mi hija cumplió un año decidió que dormir constituía una gran pérdida de tiempo. Hasta que cumplió cinco años compartimos una sucesión de largas noches en vela plagadas de colores en inglés, variaciones musicales, bailes, comidas... Pero sobre todo cuentos. Cientos de miles de cuentos. Cuando a mi marido y a mí se nos agotó la imaginación y a ella la agotaron Dickens, Perrault y demás cuenteros de fama, redescubrimos juntos uno de los conjuntos de historias más maravillosos de la literatura universal. El Romancero. Nuestro Romancero. Me gusta releerlo de vez en cuando y siempre consigue arrancarme una lágrima o como esta variación sobre el Romance de Gerineldo, paje al que el rey sorprende yaciendo con la princesa... Una gran sonrisa. Por estas cosas sigue siendo tan hermosamente "actual" y universal.

Negativa de Gerineldo:
-Que tengo hecho juramento a la Virgen de la Estrella
 de no casarme jamás con quien no ha sido doncella. 
 A la Virgen de la Estrella le tengo prometido
 no casarme con mujer que con ella ya he dormido.
 No lo querrá Dios del cielo ni la Virgen del Olvido
 que yo sea casado con mujer que haya dormido.
 No lo logre, señor conde, que yo el primero no he sido.

Castigo del rey:
- ¡Rodela contra mi espada!- y le mandó quemar vivo
 y que le saquen los ojos pa que sirva de testigo.
Traición, traición, mi castillo; traición, traición, mi princesa!
 Que al pobre de Gerineldo le cortaron la cabeza.
 Que la quieras, que la dejes, tú te casaras con ella.
O te casas, Gerineldo, o te corto la cabeza. 

Respuesta de Gerineldo:
-Yo me casaré, rey padre, no me cortéis la cabeza.
 Juramento tengo hecho a la Virgen del Pilar;
Mujer que ha sido mi dama con ella me he de casar.

Moraleja...

Publicado por Farela.