Un año más se acerca el 25 de mayo. El aniversario del estreno de aquella película en 1977, el día de la toalla para los seguidores de Douglas Adams y el Magnífico 25 de mayo para los adeptos a Terry Prachett...
Pero es que este 25 de mayo, además, es el décimo quinto aniversario de
la primera celebración del Día del Orgullo Friki. Porque ya han pasado 15 años
de aquella jornada de 2006 en que un grupo de unos 300 locos, convocados por el
señor Buebo, se juntaron por primera vez, en Madrid, para demostrarle al mundo,
no solo que no se arrepentían de ser los raritos de la clase ni de sus
“extrañas” aficiones, sino que estaban orgullosos de serlo.
Y quince años después y tras los acontecimientos de los últimos tiempos, los
Frikis estamos a punto de convertiros a todos en auténticos creyentes del
frikismo. Y estamos a punto de dominar el mundo.
Porque durante este año de pandemia se nos ha pedido a todos que nos
quedáramos en casa, encerrados, visionando los contenidos de los canales de VOD
y de las plataformas digitales, leyendo todo tipo de literatura o jugando a
toda clase de juegos. Y eso es algo para lo que los Frikis estamos especialmente
dotados. Es uno de nuestros superpoderes. Y por otra parte es un superpoder muy
contagioso.
Porque después de protagonizar este episodio de Black Mirror que se nos
antoja eterno, después de soportar la claustrofobia de no poder abandonar la
oscura nave de Zion para poder regresar a la luminosa Matrix, después de sentir
que llevamos un año luchando en Hogwarts, en Yavin, en la Batalla de los Bastardos,
o en los campos de Pelennor, y que la lucha parece no tener fin, ¿quién no se
siente un poco Frodo, Luke, Harry, Siete de Nueve, Eowin, u Once?
Después de haber conseguido que durante más de un año todo el mundo se
haya aficionado a ver sus películas y series favoritas, una y otra vez, a jugar
a diferentes juegos de mesa o de videojuegos, a leer toda clase de literatura e
incluso comics… después de todo eso, ¿quién puede decir que no es un poco friki?
Y además, y por si todo esto fuera poco, y de fin de fiesta, para salir
de esta distopía en la que nos hallamos, los poderes fácticos mundiales nos
ofrecen, como solución, un suero mágico que, tras inyectárnoslo, no solo evitará
que nos contagiemos de la Covid, sino que nos aumentará la cobertura del móvil,
nos dará toda clase de superpoderes y nos hará más frikis si cabe. Es el Félix
Felicis, el Miruvor de Imladris, la auténtica Cerveza Romulana o el suero del
Supersoldado, (aunque los muggles, los nofris y las “personas con capacidades de
ocio limitadas” se empeñan en llamarlo vacuna).
Así que un año más, y cuando estamos a punto de dar el último golpe de
gracia a la pandemia. Cuando estamos a punto de lanzar el último expelliarmus, de
disparar el último torpedo de fotones, o de dar el último sablazo… con la
ventaja de la altura; cuando estamos a punto de conquistar el mundo:
¡Larga vida al Friki!...
Y sobre todo, poneos el suero mágico: ¡Vacunaos!
Y ahora, si os place, visitad este enlace:
Publicado por Balder
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